El consumidor ahora se enfoca en alimentos innovadores más nutritivos, con ingredientes simples y sin olvidar que cuenten con excelente calidad; aquí se presentan cuáles serán nuevas tendencias para el 2016.
Lo dulce y lo salado
Según Food Dive, ahora con la tendencia de reducir el consumo de azúcar muchos productos han optado por mezclar lo dulce y lo salado. Según Ciara McCabe, de Kerry Group, el 2016 va a venir lleno de nuevos productos con esta mezcla porque atraen y entusiasman a los consumidores. Las posibilidades podrían ser infinitas, pero ya se ven en el mercado ejemplos de chocolates con chile, caramelos con sal, y yogures con pepino y cilantro.
La etiqueta y su claridad
Se han publicado estudios que demuestran que ahora los consumidores tienen menos confianza en las marcas, es por esta razón que muchas de ellas invierten tiempo y dinero para poder crear consumidores leales.
Los consumidores leales son muy importantes para las compañías; según la especialista Naomi Kasolowsky, se necesitan 20 consumidores nuevos para reemplazar a un consumidor leal. Por eso es que la confianza y la transparencia en la etiqueta son parte de este nuevo año 2016. Las empresas tendrán la tendencia a reportar a sus consumidores los orígenes de los ingredientes y los métodos de producción de los productos alimenticios para aumentar la confianza por parte de los mismos.
Stevia: el nuevo azúcar
La FDA recomendó una ingesta menor al 10% diario de azúcares añadidos, por esta razón es que muchas empresas han reformulado sus productos y van a utilizar nuevos tipos de endulzantes. Según Euromonitor, desde el 2010 al 2015 existió un reemplazo del azúcar blanca y la venta de la fructosa subió un 4%; los jarabes de fructosa y glucosa, sucrosa y sacarina aumentaron sus ventas más de 2%; el azúcar morena, la sucralosa y el acesulfame de potasio aumentaron sus ventas menos de 2%, mientras que el aspartame alrededor del 1%. Pero la Stevia marcó récords, con un crecimiento del 50% desde el 2010.
La stevia es una buena alternativa para endulzar los productos alimenticios, comentó Kevin Sherman de True Drinks, porque es fácil de cultivar y está ibre de organismos genéticamente modificados que podrían alarmar a muchos consumidores. Para contrarrestar el sabor amargo que podría tener la stevia, se pueden usar mezclas (como lo hace Coca Cola Life) con azúcar blanca, o incluso azúcares de otras fuentes como el coco.
Una nueva mirada a las grasas
La FDA ha prohibido el uso de grasas trans y se limita el consumo de los aceites parcialmente hidrogenados; pero ahora los consumidores ven que una dieta necesita un consumo de aceites beneficiosos para la salud como por ejemplo el aceite de oliva. Mintel marcó que en el 2016 va a existir un cambio de visión hacia los aceites y grasas. Ahora el consumidor es consciente de que el contenido de grasa no es uno de los principales factores al momento de escoger un alimento, sino que es más importante mirar el tipo de grasa que contiene el alimento y cuánto este representa a su consumo diario.
El menú semi-vegetariano
Aunque muchos consumidores no dejarán de consumir proteína animal, ahora optan por encontrar menús que ofrezcan una alternativa a la carne. Se aumentará el consumo de algas, granos y frijol que ofrecen una buena nutrición, aunque diferente a la de la proteína animal, para poder variar su menú. McCormick & Company determinó que las proteínas como la quinoa son parte del pronóstico de sabores escogidos para el 2016.
Productos ricos, funcionales y nutritivos
Ahora el consumidor buscará el valor agregado a los productos que consuma. Muchos buscan productos que contengan beneficios para la salud digestiva, del cerebro, corazón e inmunológica, y que aparte tengan un precio accesible y sean de buena calidad. Un ejemplo de esto son los productos fermentados como el yogurt, que por su contenido de probióticos ofrecen ciertos beneficios.
El 2016 abre un campo nuevo a la innovación y el desarrollo de las empresas. Es una tarea que deben tener para ofrecer productos de calidad con valor agregado y que puedan satisfacer al consumidor.
Fuente: Anfab vía Alfa Editores Técnicos